domingo, 24 de abril de 2022

" Vida en Cristo " ( CIC 2044- 2046 )

 


                                     " III Vida moral y testimonio misionero

2044   La fidelidad de los bautizados es una condición primordial para el anuncio del Evangelio y para la misión de la Iglesia en el mundo. Para manifestar ante los hombres su fuerza de verdad y de irradiación, el mensaje de la salvación debe ser autentificado por el testimonio de vida de los cristianos. " El mismo testimonio de la vida cristiana y las obras buenas realizadas con espíritu sobrenatural son eficaces para atraer a los hombres a la fe y a Dios " ( AA 6).

2045   Los cristianos, por ser miembros del Cuerpo, cuya cabeza es Cristo ( Cf. Ef 1, 22), contribuyen a la edificación de la Iglesia mediante la constancia de sus convicciones y de sus costumbres. La Iglesia aumenta, crece y se desarrolla por la santidad de sus fieles ( Cf. LG 39), " hasta que lleguemos al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud en Cristo" ( Ef 4, 13).

2046   Llevando una vida según Cristo, los cristianos apresuran la verdad del Reino de Dios, " Reino de justicia, de verdad y de paz" ( MR, Prefacio de Jesucristo Rey ). Esto no significa que abandonen sus tareas terrenas, sino que, fieles a su Maestro, las cumplan con rectitud, paciencia y amor." ( CIC 2044-2046).

Comentario_

La unidad de vida es ser cristiano y actuar como cristiano, no debe preocuparnos que por nuestras obras nos conozcan como seguidores de Cristo, más vale, tengamos miedo de no ser coherentes con nuestra fe porque el Señor dijo: " A quién me reconozca delante de los hombres yo lo reconoceré frente a mi Padre que está en los cielos, y a quién me negare delante de los hombres yo lo negaré delante de mi Padre..." Y en otro pasaje " no todo el que dice Señor, Señor entrará en el Reino de los cielos, sino al que hace la voluntad de mi Padre ".


domingo, 17 de abril de 2022

" Vida en Cristo" ( CIC 2041- 2043)

 


                                                     " II Los mandamientos de la Iglesia

2041   Los mandamientos de la Iglesia se sitúan en la línea de una vida moral referida a la vida litúrgica y que se alimenta de ella. El carácter obligatorio de estas leyes positivas promulgadas por la autoridad eclesiástica tiene por fin garantizar a los fieles el mínimo indispensable en el espíritu de oración y en el esfuerzo moral, en el crecimiento del amor de Dios y del prójimo. Los mandamientos más generales de la Santa Madre Iglesia son cinco:

2042   El primer mandamiento ( oír misa entera los domingos y fiestas de precepto y no realizar trabajos serviles) exige a los fieles que santifiquen el día en el cual se conmemora la Resurrección del Señor y las fiestas litúrgicas principales en honor de los misterios del Señor, de la Santísima Virgen y de los santos, en primer lugar participando de la celebración eucarística, y descansando de aquellos trabajos y ocupaciones que pueden impedir esa santificación de estos días ( Cf. COC can. 1246-1248; CCEO can. 880, 3 ; 881, 1.2.4).

El segundo mandamiento ( confesar los pecados al menos una vez al año) asegura la preparación a la Eucaristía mediante la recepción del sacramento de la Reconciliación, que continúa la obra de conversión y de perdón del Bautismo ( Cf. CDC can. 989; CCEO can. 719 ).

El tercer mandamiento ( Recibir el sacramento de la Eucaristía al menos por Pascua) garantiza un mínimo en la recepción del Cuerpo y la Sangre del Señor, en conexión con el tiempo de Pascua, origen y centro de la liturgia cristiana ( Cf. CDC can. 920; CCEO can. 881, 3).

2043   El cuarto mandamiento ( ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Santa Madre Iglesia) asegura los tiempos de ascesis y de penitencia que nos preparan para las fiestas litúrgicas, y para adquirir el dominio sobre nuestros instintos y la libertad del corazón ( Cf. CIC can. 1249- 1251; CCEO can. 882 ).

El quinto mandamiento ( ayudar a la Iglesia en sus necesidades) enuncia que los fieles están, además obligados a ayudar, cada uno según su posibilidad, a las necesidades materiales de la Iglesia ( Cf. CDC can. 222; CCEO can. 25 ). ( Las Conferencias Episcopales pueden además establecer otros preceptos eclesiásticos para el propio territorio) " 

( CIC 2041-2043).

Comentario:

Los mandamientos de la Iglesia son una ayuda para que los fieles podamos ser dóciles a la voluntad de Dios, entendamos que la Iglesia es Madre y Maestra y a pesar de los defectos de sus ministros Ella es el camino que el Señor dispuso para distribuir la gracia de los sacramentos.



domingo, 10 de abril de 2022

" Vida en Cristo" ( CIC 2032- 2040)

 


                                     "  I Vida moral y magisterio de la Iglesia

2032   La Iglesia " columna y fundamento de la verdad" ( 1Tm 3, 15), " recibió de los apóstoles este solemne mandato de Cristo, de anunciar la verdad que nos salva" ( LG 17). "Compete siempre y en todo lugar a la Iglesia proclamar los principios morales, incluso los referentes al orden social, así como dar su juicio sobre cualesquiera asuntos humanos, en la medida en que los exijan los derechos fundamentales de la persona humana o la salvación de las almas" ( CIC can. 747, 2).

2033   El magisterio de los pastores de la Iglesia en materia moral se ejerce ordinariamente en la catequesis y en la predicación con la ayuda de las obras de los teólogos y de los autores espirituales. Así se ha transmitido de generación en generación, bajo la dirección y vigilancia de los pastores, el " depósito" de la moral crsitiana, compuesto de un conjunto característico de normas, de mandamientos y de virtudes que proceden de la fe en Cristo y están vivificados por la caridad. Esta catequesis ha tomado tradicionalmente como base, junto al Credo y el Padrenuestro, el Decálogo que enuncia los principios de la vida moral válidos para todos los hombres.

2034   El Romano Pontífice y los obispos como " maestros auténticos por estar dotados de la autoridad de Cristo..., predican al pueblo que tienen confiado la fe que hay que creer y que hay que llevar a la práctica" ( LG 25). El magisterio ordinario y universal del Papa y de los obispos en comunión con él enseña a los fieles la verdad que han de creer, la caridad que han de practicar, y la bienaventuranza que han de esperar.

2035   El grado supremo de la participación en la autoridad de Cristo está asegurado por el carisma de la infalibilidad. Esta se extiende a todo el depósito de la revelación divina  (Cf. LG 25); se extiende también a todos los elementos de doctrina, comprendida la moral, sin los cuales las verdades salvíficas de la fe no pueden ser salvaguardadas, expuestas u observadas ( CF. CDF, decl. " Msterium ecclesiae " 3 ).

2036   La autoridad del Magisterio se extiende también a los preceptos específicos de la ley natural, porque su observancia, exigida por el Creador, es necesaria para la salvación. Recordando las prescripciones de la ley natural, el Magisterio de la Iglesia ejerce una parte esencial de su función profética de anunciar a los hombres lo que son en verdad y de recordarles lo que deben ser ante Dios ( Cf. DH 14).

2037   La ley de Dios, confiada a la Iglesia es enseñada a los fieles como camino de vida y de verdad. Los fieles, por tanto, tienen el derecho ( Cif. CIC can. 213) de ser instruidos en los preceptos divinos salvíficos que purifican el juicio y, con la gracia, sanan la razón humana herida. Tienen el deber de observar las constituciones y los decretos promulgados por la autoridad legítima de la Iglesia. Aunque sean disciplinares, estas determinaciones requieren la docilidad en la caridad.

2038   En la obra de enseñanza y de aplicación de la moral cristiana, la Iglesia necesita la dedicación de los pastores, la ciencia de los teólogos, la contribución de todos los cristianos y de los hombres de buena voluntad. La fe y la práctica del Evangelio procuran a cada uno una experiencia de la vida " en Cristo" que ilumina y da capacidad para estimar las realidades divinas y humanas según el espíritu de Dios ( Cf. 1Co 2, 10-15). Así el Espíritu Santo puede servirse de los más humildes para iluminar a los sabios y los constituidos en más alta dignidad.

2039   Los ministerios deben ejercerse en un espíritu de servicio fraternal y de entrega a la Iglesia en nombre del Señor ( Cf. Rm 12, 8-11). Al mismo tiempo, la conciencia de cada cual en su juicio moral sobre sus actos personales, debe evitar encerrarse en una consideración individual. Con mayor empeño debe abrirse a la consideración del bien de todos según se expresa en la ley moral, natural y revelada, y consiguientemente en la ley de la Iglesia y en la enseñanza autorizada del Magisterio sobre las cuestiones morales. No se ha de oponer la conciencia personal y la razón a la ley moral o al Magisterio de la Iglesia.

2040   Así puede desarrollarse entre los cristianos un verdadero espíritu filial con respecto a la Iglesia. Es el desarrollo normal de la gracia bautismal que nos engendró en el seno de la Iglesia y nos hizo miembros del Cuerpo de Cristo. En su solicitud maternal, la Iglesia nos concede la misericordia de Dios que va más allá del simple perdón de nuestros pecados y actúa especialmente en el sacramento de la Reconciliación. Como madre previsora, nos prodiga también en su liturgia, día tras día, el alimento de la Palabra y de la Eucaristía del Señor ". ( Cic 2032- 2040).

Comentario:

" Ten veneración y respeto por la Santa Liturgia de la Iglesia y por sus ceremonias particulares-- Cúmplelas fielmente-- ¿ No ves que los pobrecitos ˋ'hombres necesitamos que hasta lo más grande y noble entre por los sentidos ?" ( SJM Camino 521).

Esta reflexión nos sirve  para tratar de seguir la Misa con devoción y mirando los gestos, colores de los ornamentos y palabras de la celebración.


 

domingo, 3 de abril de 2022

" Vida en Cristo" ( CIC 2030-2031)

 

                                                " Artículo 3: La Iglesia, madre y educadora

2030   El cristiano realiza su vocación en la Iglesia, en comunión con todos los bautizados. De la Iglesia recibe la Palabra de Dios, que contiene las enseñanzas de la ley de Cristo.  (Cf. Ga 6, 2). De la Iglesia recibe la gracia de los sacramentos que le sostienen en el camino. De la Iglesia aprende el ejemplo de la santidad; reconoce en la Bienaventurada Virgen María la figura y la fuente de esa santidad; la discierne en el testimonio auténtico de los que la viven; la descubre en la tradición espiritual y en la larga historia de los santos que le han precedido y que la liturgia celebra a lo largo del santoral.

2031   La vida moral es un culto espiritual. Ofrecemos nuestros cuerpos " como hostia viva, santa, agradable a Dios " ( Rm 12, 1) en el seno del Cuerpo de Cristo que formamos y en comunión con la ofrenda de su Eucaristía. En la liturgia y en la celebración de los sacramentos, plegaria y enseñanza se conjugan con la gracia de Cristo para iluminar y alimentar el obrar cristiano. La vida moral, como el conjunto de la vida cristiana, tiene su fuente y su cumbre en el sacrificio eucaristíco." ( CIC 2030-2031).

Comentario:

El Catecismo de la Iglesia tiene cuatro partes, como lo aprendimos en la introducción de este blog : 

 La Primera Parte es El Credo las verdades de nuestra fe que son como el cimiento de nuestra vida cristiana, es un cimiento firme como roca.

La Segunda Parte es la Celebración del misterio cristiano Los sacramentos que son las columnas  de nuestro edificio de vida cristiana.

La Tercera Parte es la Vida en Cristo La Moral y  los mandamientos de la Ley de Dios y de la Iglesia y  que es la mamposteria de nuestro edificio de vida cristiana.

La Cuarta Parte es La oración cristiana que es el acabado de nuestro edificio.

 En un edificio las cuatro partes son importantes para acabarlo bien y en nuestra vida de santidad e imitación de Cristo dependemos de tener bien realizados las cuatro partes de nuestro edificio.