domingo, 26 de enero de 2020

" La celebración del misterio cristiano" ( CIC 1333-1336)



                                   " III La Eucaristía en la Economía
                                            de la salvación

                                 Los signos del pan y del vino

1333  En el corazón de la celebración de la Eucaristía se encuentran el pan y el vino que por las palabras de Cristo y por la invocación del Espíritu Santo, se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Fiel a la orden del Señor, la Iglesia continúa haciendo, en memoria de El, hasta su retorno glorioso, lo que El hizo la víspera de su pasión: " Tomó pan...", " tomó el caliz lleno de vino..." Al convertirse misteriosamente en el Cuerpo y la Sangre de Cristo, los signos del pan y del vino siguen significando también la bondad de la creación. Así, en el ofertorio, damos gracias al Creador por el pan y el vino ( Cf. Sal 104, 13-15), fruto " del trabajo del hombre", pero antes, " Fruto de la tierra" y  "de la vid", dones del Creador. La Iglesia ve en el gesto de Melquisedec, rey y sacerdote, que  "ofreció pan y vino" ( Gn 14, 18), una prefiguración de su propia ofrenda ( Cf. MR, Canon Romano 95).

1334 En la Antigua Alianza, el pan y el vino eran ofrecidos como sacrificio entre las primicias de la tierra en señal de reconocimiento al Creador. Pero reciben también una nueva significación en el contexto del Exodo: los panes ázimos que Israel come cada año en la Pascua conmemoran la salida apresurada y liberadora de Egipto. El recuerdo del maná del desierto sugerirá siempre a Israel que vive del pan de la Palabra de Dios ( Dt 8, 3). Finalmente, el pan de cada día es el fruto de la Tierra prometida, prenda de la fidelidad de Dios a sus promesas. El " cáliz de bendición" ( 1Co 10, 16), al final del banquete pascual de los judíos, añade a la alegría festiva del vino una dimensión escatológica, la de la espera mesiánica del restablecimiento de Jerusalén. Jesús instituyó su Eucaristía dando un sentido nuevo y definitivo a la bendición del pan y del cáliz.

1335 Los milagros de la multiplicación de los panes, cuando el Señor dijo la bendición, partió y distribuyó los panes por medio de sus discípulos para alimentar la multitud, prefiguran la sobreabundancia de este único pan de su Eucaristía ( Cf. Mt 14, 13-21; 15, 32-29). El signo del agua convertida en vino en Caná ( Cf. Jn 2, 11), anuncia ya la hora de la glorificación de Jesús. Manifiesta el cumplimiento del banquete de las bodas en el Reino del Padre, donde los fieles beberán el vino nuevo ( Cf. Mt 14, 25) convertido en Sangre de Cristo.

1336 El primer anuncio de la Eucaristía dividió a los discípulos, igual que el anuncio de la pasión los escandalizó: " Es duro este lenguaje, ¿ quién puede escucharlo? ( Jn 6, 60). La Eucaristía y la cruz son piedras de tropiezo. Es el mismo misterio, y no cesa de ser ocasión de división. "¿ También vosotros queréis marcharos?" ( Jn 6, 67): esta pregunta del Señor resuena a través de las edades, como invitación de su amor a descubrir que sólo El tiene " palabras de vida eterna" ( Jn 6, 68), y que acoger en la fe el don de su Eucaristía es acogerlo a El mismo". ( CIC 1333-1336)

Comentario: Es oportuno meditar el punto 87 de Camino de San Josemaría " No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que procede de la boca de Dios"; dijo el Señor.- ¡ Pan y Palabra!: Hostia y oración.
Si no, no vivirás vida sobrenatural" 


lunes, 20 de enero de 2020

" La celebración del misterio cristiano" ( 1328-1332)




                                        " El nombre de este sacramento

1328 La riqueza inagotable de este sacramento se expresa mediante los distintos nombres que se le da. Cada uno de estos nombes evoca alguno de sus aspectos. Se le llama:

        Eucaristía, porque es acción de gracias a Dios. La palabra " eucharistein" ( Lc 22, 19; 1Co 11, 24) y " eulogein" ( Mt 26, 26; Mc 14, 22) recuerdan las bendiciones judías que proclaman- sobre todo durante la comida- las obras de Dios: la creación, la redención y la santificación.

1329 Banquete del Señor ( Cf. 1Co 11, 20), porque se trata de la Cena que el Señor celebró con sus discípulos la víspera de su pasión y de la anticipación del banquete de bodas del Cordero ( Cf. Ap 19,9) en la Jerusalén celestial.

         Fracción del pan, porque este rito, propio del banquete judío, fue utilizado por Jesús cuando bendecía y distribuía el pan como cabeza de familia ( Cf. Mt5 14,19; 15, 36; Mc 8, 6, 19), sobre todo en la Última Cena ( Cf. Mt 26, 26; 1Co 11, 24). En este gesto los discípulos lo reconocerán después de su resurrección ( Lc 24, 13-35), y con esta expresión los primeros cristianos designaron sus asambleas eucarísticas ( Cf. Hch 2, 42. 46; 20, 7, 11). Con él se quiere significar que todos los que comen de este  único pan, partido, que es Cristo, entran en comunión con El y forman un solo cuerpo en El ( Cf. 1Co 10, 16-17).

1330 Memorial de la pasiuón y de la resurrección del Señor:

         Santo Sacrificio, porque actualiza el único sacrificio de Cristo Salvador e incluye la ofrenda de la Iglesia; o también santo sacrificio de la misa, " sacrificio de alabanza" ( Hch 13, 15; Cf. Sal 116, 13, 17), sacrificio espiritual ( Cf. 1P 2, 5) sacrificio puro ( Cf. Ml 1, 11) y santo, puesto que completa y supera todos los sacrificios de la Antigua Alianza.

          Santa y divina Liturgia, porque toda la Liturgia de la Iglesia encuentra su centro y su expresión más densa en la celebración de este sacramento; en el mismo sentido se la llama también celebración de los santos misterios. Se habla también del Santísimo Sacramento porque es el Sacramento de los Sacramentos. Con este nombre se designan las especies eucarísticas guardadas en el Sagrario.

1331 Comunión, porque por este sacramento nos unimos a Cristo que nos hace partícipes de su Cuerpo y de su Sangre para formar un solo cuerpo ( Cf. 1Co 10, 16-17); se la llama también las cosas santas ["tabagia sancta"] ( Const. Apost. 18, 13- 12; Didaché 9, 5; 10, 6)- es el sentido primero de la  "comunión de los santos" de que habla el Símbolo de los Apóstoles, pan de los ángeles, pan del cielo, medicina de inmortalidad ( San Ignacio de Ant. , Eph 20, 2), viático...

1332 Santa Misa, porque la Liturgia en la que se realiza el misterio de salvación se termina con el envío de los fieles ( " missio") a fin de que cumplan la voluntad de Dios en su vida cotidiana" (CIC 1328- 1332).

Comentario: La riqueza del vocabulario que acabamos de leer nos ayuda a entender la grandeza del misterio al que asistimos cada vez que vamos a la celebración eucaristíca y a valorar la importancia,que tiene para el cristiano la celebración de la misa dominical.  


domingo, 12 de enero de 2020

" La celebración del misterio Cristiano "(CIC 1322-1327)



       " Artículo 3: El Sacramento de la              Eucaristía "

1322 La sagrada Eucaristía culmina la iniciación cristiana. Los que han sido elevados a la dignidad del sacerdocio real por el Bautismo y configurados más profundamente con Cristo por la Confirmación, participan por medio de la Eucaristía con toda la comunidad en el y sacrificio mismo del Señor.

1323 " Nuestro Salvador, en la Última Cena, la noche en que fue entregado instituyo el sacrificio eucarístico de su cuerpo y de su sangre para perpetuar por los siglos, hasta su vuelta, el sacrificio de la cruz y confiar así a su Esposa amada, la Iglesia,  el memorial de su muerte y resurrección  sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de amor, banquete pascual en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la gloria futura" "SC 47).

   I La Eucaristía, fuente y cumbre
         de la vida eclesial 

1324 La Eucaristía es " fuente y cima de toda la vida cristiana " ( LG 11 ).  Los demás sacramentos, como también todos los ministerios eclesiales y las obras de apostolado, están unidos a la Eucaristía y a ella se ordenan. La Sagrada Eucaristía, en efecto,  contiene todo el bien espiritual de la Iglesia es decir,  Cristo mismo,  nuestra Pascua" ( PO 5 ).

1325 " La Eucaristía significa y realiza la comunión de vida con Dios y la unidad del Pueblo de Dios por las que la Iglesia es ella misma. En ella se encuentra a la vez la cumbre de la acción por la que, en Cristo,  Dios santifica al mundo   y del culto que en el Espíritu Santo los hombres dan a Cristo y por El al Padre" ( CdR. inst." Eucharisticum mysterium",6).

1326 Finalmente, por la celebración eucarística nos unimos ya a la Liturgia del cielo y anticipamos la vida eterna cuando Dios será todo en todos  ( Cf.  1Co 15  28).

1327 En resumen, la Eucaristía es el compendio y la suma de nuestra fe" " Nuestra manera de pensar armoniza con la Eucaristía, y a su vez la Eucaristía confirma nuestra manera de pensar" ( San Ireneo, hasta.4,18,5)" (CIC 1322-1327).

Comentario: No nos acostumbremos a la presencia eucarística del Señor adoremos profundamente y agradezcamos el regalo que el Señor Jesús nos dejó para santificarnos y hacernos semejantes a El.




lunes, 6 de enero de 2020

" La celebración del misterio cristiano" ( CIC 1315-1321)



                                                             "  Resumen "

1315              "  Al enterarse los apóstoles que estaban en Jerusalén de que Samaria había aceptado la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos bajaron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo; pues todavía no había descendido sobre ninguno de ellos; únicamente habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. Entonces les inponían las manos y recibían el Espíritu Santo" ( Hch 8, 14-17).

1316              La Confirmación perfecciona la gracia bautismal; es el sacramento que da el Espíritu Santo para enraizarnos más profundamente en la filiación divina, incorporarnos ' más firmemente a Cristo, hacer más sólido nuestro vínculo con  la Iglesia, asociarnos todavía más a su misión y ayudarnos a dar testimonio de la fe cristiana por la palabra acompañada de las obras'.

1317             La Confirmación, como el Bautismo, imprime en el alma del cristiano un signo espiritual o carácter indeleble; por eso este sacramento sólo se puede recibir una vez en la vida.

1318             En Oriente, este sacramento es administrado inmediatamente después del Bautismo y es seguido de la participación en la Eucaristía, tradición que pone de relieve la unidad de los tres sacramentos de la iniciación cristiana. En la Iglesia latina se administra este sacramento cuando se ha alcanzado el uso de razón, y su celebración se reserva ordinariamente al obispo, significando así que este sacramento robustece el vínculo eclesial.

1319             El candidato a la Confirmación que ya ha alcanzado el uso de razón debe profesar la fe, estar en estado de gracia, tener la intención de recibir el sacramento y estar preparado para asumir su papel de discípulo y de testigo de Cristo, en la comunidad eclesial y en los asuntos temporales.

1320             El rito esencial de la Confirmación es la unción con el Santo Crisma en la frente del bautizado ( y en Oriente, también en los otros órganos de los sentidos), con la imposición de la mano del ministro y las palabras: " Accipe signaculum doni Spiritus Sancti"- " Recibe por esta señal el don del Espíritu Santo", en el rito romano: " Signaculum doni Spiritus Sancti"- " Sello del don del Espíritu Santo ", en el rito bizantino.

1321             Cuando la Confirmación se celebra separadamente del Bautismo, su conexión con el Bautismo se expresa entre otras cosas por la renovación de los compromisos bautismales. La celebración de la Confirmación dentro de la Eucaristía contribuye a subrayar la unidad de los sacramentos de la iniciación cristiana". ( CIC 1315-1321).

Comentario:Al conocer la importancia del sacramento de la Confirmación por su carácter de efusión del Espíritu Santo y al formar parte de los tres sacramentos de la iniciación cristiana estemos muy atentos a la celebración de este sacramento en nuestros hijos y allegados y demósle la importancia que tiene como el Bautismo y la Eucaristía.
" Vivir según el Espíritu Santo es vivir de fe, de esperanza, de caridad; dejar que Dios tome posesión de nosotros y cambie de raíz nuestros corazones, para hacerlos a su medida" ( SJM Es Cristo que pasa hom El Gran Desconocido p. 134).