lunes, 27 de febrero de 2017

" La profesión de la fe" ( CIC 543-546)



                                             " El anuncio del Reino de Dios

543 Todos los hombres están llamados a entrar en el Reino. Anunciado en primer lugar a los hijos de Israel ( Cf. Mt 10, 5-7 ), este reino mesiánico está destinado a acoger a los hombres de todas las naciones ( Cf. Mt 8, 11; 28, 19). Para entrar en El, es necesario acoger la palabra de Jesús:

                                  La Palabra de Dios se compara a una semilla sembrada en el campo: los que escuchan con fe y se unen al rebaño de Cristo han acogido el Reino; después la semilla, por sí misma, germina y crece hasta el tiempo de la siega ( LG 5).

544 El Reino pertenece a los pobres y a los pequeños, es decir, a los que lo acogen con un corazón humilde. Jesús fue enviado para " anunciar la Buena Nueva a los pobres " ( Lc. 4, 18; Cf. 7, 22). Los declara bienaventurados porque de " ellos es el Reino de los cielos"( Mt 5, 3); a los " pequeños" es a quienes el Padre se ha dignado revelar las cosas que ha ocultado a los sabios y prudentes ( Cf. Mt 11, 25). Jesús, desde el pesebre hasta la cruz comparte la vida de los pobres; conoce el hambre ( Cf. Mc 2, 23- 26; Mt 21, 18), la sed ( Cf. Jn 4, 6-7; 19, 28) y la privación ( Cf. Lc 9, 58). Aún más: se identifica con los pobres y hace del amor activo hacia ellos condición para entrar en su Reino ( Cf. Mt 25, 31- 46).

545 Jesús invita a los pecadores al banquete del Reino: " No he venido a llamar a justos sino a pecadores" ( Mc 2, 17; Cf. 1Tm 1, 15). Les invita a la conversión, sin la cual no se puede entrar en el Reino, pero les muestra de palabra y con hechos la misericordia sin límites de su Padre hacia ellos ( Cf. Lc 15, 11-32) y la inmensa " alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta" ( Lc. 15, 7). La prueba suprema de este amor será el sacrificio de su propia vida " para remisión de los pecados" ( Mt 26, 28).

546 Jesús llama a entrar en el Reino a través de las parábolas, rasgo típico de su enseñanza ( Cf. Mc 4, 33-34). Por medio de ellas invita al banquete del Reino ( Cf. Mt 22, 1-14), pero exige también una elección radical para alcanzar el Reino, es necesario darlo todo ( Cf. Mt 13, 44-45); las palabras no bastan, hacen falta obras ( Mt 21, 28-32). Las parábolas son como un espejo para el hombre: ¿ acoge la palabra como un suelo duro o como una buena tierra ( Mt 13, 3-9)?¿ Qué hace con los talentos recibidos ( Cf. Mt 25, 14-30)? Jesús y la presencia del Reino en este mundo están secretamente en el corazón de las parábolas. Es preciso entrar en el Reino, es decir, hacerse discípulo de Cristo para  "conocer los Misterios del Reino de los cielos" ( Mt 13, 11). Para los que están " fuera" ( Mc 4, 11), la enseñanza de las parábolas es algo enigmático ( Cf. Mt 13, 10-15). " ( CIC 543-546).

Comentario: San Juan Pablo II nos propuso meditar los jueves los misterios de la luz, como una novedad, en los misterios del Rosario. El tercer misterio de la Luz se refiere justamente, a la predicación de Jesús sobre las parábolas del Reino que nos introduce en el Corazón Misericordioso del Padre que " no quiere que se pierda ni uno sólo de los hombres". y que seamos perfectos como  "mi Padre celestial es perfecto" El nos da la gracia para alcanzar esa perfección basta que queramos hacer su Voluntad.

lunes, 20 de febrero de 2017

" La profesión de la fe" ( CIC 538-542)



                                                  " Las Tentaciones de Jesús"

" 538 Los evangelios hablan de un tiempo de soledad de Jesús en el desierto inmediatamente después de su bautismo por Juan: " Impulsado por el Espíritu"  al desierto, Jesús permanece allí sin comer durante cuarenta días; vive entre los animales y los ángeles le servían ( Cf. Mc 1, 12-13). Al final de este tiempo, Satanás le tienta tres veces tratando de poner a prueba su actitud filial hacia Dios. Jesús rechaza estos ataques que recapitulan las tentaciones de Adán en el Paraíso y las de Israel en el desierto, y el diablo se aleja de El " hasta el tiempo determinado" ( Lc. 4, 13).

539 Los evangelistas indican el sentido salvífico de este acontecimiento misterioso. Jesús es el nuevo Adán que permaneció fiel allí donde el primero sucumbió a la tentación. Jesús cumplió perfectamente la vocación de Israel; al contrario de los que anteriormente provocaron a Dios durante cuarenta años por el desierto ( Cf. Sal 95, 10), Cristo se revela como el Siervo de Dios totalmente obediente a la voluntad divina. En esto Jesús  es vencedor del diablo; El ha " atado al hombre fuerte" para despojarle de lo que se había apropiado ( Mc 3, 27). La victoria de Jesús en el desierto sobre el Tentador es un anticipo de la victoria de la Pasión, suprema obediencia de su amor filial al Padre.

540 La tentación de Jesús manifiesta la manera que tiene de ser Mesías el Hijo de Dios, en oposición a la que le propone Satanás y a la que los hombres ( Cf. Mt 16, 21- 23) le quieren atribuir. Es por eso por lo que Cristo venció al Tentador a favor nuestro: " Pues no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino probado en todo igual que nosotros, excepto en el pecado" ( Hb 4, 15). La Iglesia se une todos los años, durante los cuarenta días de Cuaresma, al Misterio de Jesús en el desierto.

                                               " El Reino de Dios está cerca"

541 " Después que Juan  fue preso, marchó Jesús a Galilea; y proclamaba la Buena Nueva de Dios: " El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca: convertíos y creed en la Buena Nueva " ( Mc 1, 15). " Cristo, por tanto, para hacer la voluntad del Padre, inauguró en la tierra el Reino de los cielos" ( LG 3). Pues bien, la voluntad del Padre es " elevar a los hombres a la participación de la vida divina " ( LG 2). Lo hace reuniendo a los hombres en torno a su Hijo, Jesucristo. Esta reunión es la Iglesia, que es sobre la tierra " el germen y comienzo de este Reino" ( LG 5).

542 Cristo es el corazón mismo de esta reunión de los hombres como " familia de Dios". Los convoca en torno a El por su palabra, por sus señales que manifiestan el Reino de Dios, por el envío de sus discípulos. Sobre todo, El realizará la venida de su Reino por medio del gran misterio de su Pascua: su muerte en la Cruz y su Resurrección. " Cuando yo sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí" ( Jn 12, 32). A esta unión con Cristo están llamados todos los hombres ( Cf. LG 3)." ( CIC 538- 542).

Comentario: La figura de Cristo, perfecto Dios y perfecto hombre  nos interpela para ser semejantes a El en la obediencia a la voluntad de Dios, y cómo sabemos cuál es esa voluntad de Dios ? "siendo en el mundo otros Cristos el mismo Cristo" sólo con la oración, la mortificación  y los sacramentos podemos asemejarnos a El. Cristo con su obediencia ha vencido la muerte y con su Resurrección nos ha prometido nuestra propia resurrección a la gloria si somos fieles.



martes, 14 de febrero de 2017

" La profesión de la fe" ( CIC 535-537)



                                        "III Los Misterios de la vida pública de Jesús "

                                                        " El Bautismo de Jesús "

"535 El comienzo ( Cf. Lc 3, 23) de la vida pública de Jesús es su bautismo por Juan en el Jordán ( Cf. Hch 1, 22). Juan proclamaba " un bautismo de conversión para el perdón de los pecados " ( Lc 3, 3). Una multitud de pecadores, publicanos y soldados ( Cf. Lc 2, 10-14), fariseos y saduceos ( Cf. Mt 3, 7) y prostitutas ( Cf. Mt 21, 32) viene a hacerse bautizar por él. " Entonces aparece Jesús ". El Bautista duda. Jesús insiste y recibe el bautismo. Entonces el Espíritu Santo, en forma de paloma viene sobre Jesús, y la voz del cielo proclama que El es " mi Hijo amado" ( Mt 3, 13-17). Es la manifestación ( " Epifanía") de Jesús como Mesías de Israel e Hijo de Dios.

536 El bautismo de Jesús es, por su parte, la aceptación y la inauguración de su misión de Siervo doliente. Se deja contar entre los pecadores ( Cf. Is 53, 12); es ya " el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo" ( Jn 1, 29); anticipa ya el  " bautismo "  de su muerte sangrienta ( Cf. Mc 10, 38; Lc 12, 50). Viene ya a " cumplir toda justicia" ( Mt 3, 15), es decir, se somete enteramente a la voluntad de su  Padre: por amor acepta el bautismo de su muerte para la remisión de nuestros pecados ( Cf. Mt 26, 39). A esta aceptación responde la voz del Padre que pone toda su complacencia en su Hijo ( Cf. Lc 3, 22; Is 42, 1). El Espíritu que Jesús posee en plenitud desde su concepción viene a " posarse" sobre El ( Jn 1, 32-33; Cf. Is 11, 2). De El manará este Espíritu para toda la humanidad. En su bautismo, " se abrieron los cielos" ( Mt 3, 16) que el pecado de Adán había cerrado; y las aguas fueron santificadas por el descenso de Jesús y del Espíritu como preludio de la nueva creación.

537 Por el bautismo, el cristiano se asimila sacramentalmente a Jesús que anticipa en su bautismo su muerte y su resurrección: debe entrar en este misterio de rebajamiento humilde y de arrepentimiento, descender al agua con Jesús, para subir con El, renacer del agua y del Espíritu para convertirse, en el Hijo, en hijo amado del Padre y " vivir una vida nueva" ( Rm 6, 4):

                              Enterrémonos con Cristo por el  Bautismo, para resucitar con El; descendamos con El para ser ascendidos con El; ascendamos con El para ser glorificados con El ( San Gregorio Nacianc., 40, 9). Todo lo que aconteció  en Cristo nos enseña que después del baño de agua, el Espíritu Santo desciende sobre nosotros desde lo alto del cielo y que, adoptados por la voz del Padre, llegamos a ser hijos de Dios ( San Hilario, Mat. 2). ( CIC 535-537).

Comentario: Amemos nuestro bautismo y renovemos cada domingo las promesas bautismales" Por el Bautismo, somos portadores de la palabra de Cristo, que serena, que enciende y aquieta las conciencias heridas. Y para que el Señor actúe en nosotros y por nosotros, hemos de decirle que estamos dispuestos a luchar cada jornada, aunque nos veamos flojos e inútiles...Así trabajaremos con renovado empeño..porque Dios todo lo puede" ( San Josemaría " Amigos de Dios"210).





  

martes, 7 de febrero de 2017

"La profesión de la fe" ( CIC 531-534)



                                       " Los Misterios de la vida oculta de Jesús"

" 531 Jesús compartió, durante la mayor parte de su vida, la condición de la inmensa mayoría de los hombres: una vida cotidiana sin aparente importancia, vida de trabajo manual, vida religiosa judía sometida a la ley de Dios ( Cf. Ga 4, 4), vida en la comunidad. De todo este período se nos dice que Jesús estaba " sometido" a sus padres y que " progresaba en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y los hombres" ( Lc. 2, 51-52).

532 Con la sumisión a su madre, y a su padre legal, Jesús cumple con perfección el cuarto mandamiento. Es la imagen temporal de su obediencia filial a su Padre celestial. La sumisión cotidiana de Jesús a José y a María anunciaba y anticipaba la sumisión del Jueves Santo: " No se haga mi voluntad..."( Lc 22, 42). La obediencia de Cristo en lo cotidiano de la vida oculta inauguraba ya la obra de restauración de lo que la desobediencia de Adán había destruido ( Cf. Rm 5, 19).

533 La vida oculta de Nazaret permite a todos estar en comunión con Jesús a través de los caminos más ordinarios de la vida humana:

                               Nazaret es la escuela donde se comienza a entender la vida de Jesús: la escuela del Evangelio... Una lección de silencio ante todo. Que nazca en nosotros la estima del silencio, esta condición del espíritu admirable e inestimable... Una lección de vida familiar. Que Nazaret nos enseñe lo que es la familia, su comunión de amor, su austera y sencilla belleza, su carácter sagrado e inviolable... Una lección de trabajo. Nazaret, oh casa del " Hijo del Carpintero", aquí es donde querríamos comprender y celebrar la ley severa y redentora del trabajo humano...; cómo querríamos, en fin, saludar aquí a todos los trabajadores del mundo entero y enseñarles su gran modelo, su hermano divino ( Pablo VI, discurso 5 de enero 1964 en Nazaret).

534 El hallazgo de Jesús en el Templo ( Cf. Lc 2, 41-52) es el único suceso que rompe el silencio de los Evangelios sobre los años ocultos de Jesús. Jesús deja entrever en ello el misterio de su consagración total a una misión derivada de su filiación divina: " ¿ No sabíais que me debo a los asuntos de mi Padre?". María y José " no comprendieron" esta palabra, pero la acogieron en la fe, y María " conservaba cuidadosamente todas las cosas en su corazón", a lo largo de todos los años en que Jesús permaneció oculto en el silencio de una vida ordinaria" ( CIC 531- 534).

Comentario: Quisiera grabar con fuego en el corazón estas tres palabras del Papa Pablo VI " silencio, vida familiar y trabajo" es todo un programa de vida para sacar adelante la familia ¿ cuantas palabras ociosas, destruyen una familia? callar cuando no puedo decir algo positivo que ayude a limar asperezas y construir un ambiente alegre. Es el " permiso, perdón y gracias " que nos recomienda el Papa Francisco.