lunes, 29 de febrero de 2016

"La profesión de la fe" (CIC 272- 278)



                               "El misterio de la aparente impotencia de Dios"

272 La fe en Dios Padre Todopoderoso puede ser puesta a prueba por la experiencia del mal y del sufrimiento. A veces Dios puede parecer ausente e incapaz de impedir el mal. Ahora bien, Dios Padre ha revelado su omnipotencia de la manera más misteriosa en el anonadamiento voluntario y en la Resurrección de su Hijo, por los cuales ha vencido el mal. Así, Cristo crucificado es " poder de Dios y sabiduría de Dios. Porque la necedad divina es más sabia que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres" ( 1Co 2, 24-25). En la Resurrección y en la exaltación de Cristo es donde el Padre " desplegó el vigor de su fuerza" y manifestó " la soberana grandeza de su poder para con nosotros, los creyentes" ( Ef 1, 19-22).

273 Sólo la fe puede adherir a las vías misteriosas de la omnipotencia de Dios. Esta fe se gloría de sus debilidades con el fin de atraer sobre sí el poder de Cristo ( Cf. 2Co 12, 9; Fl 4, 13). De esta fe, la Virgen María es el modelo supremo: ella creyó que " nada es imposible para Dios" ( Lc 1, 37) y pudo proclamar las grandezas del Señor: " el Poderoso ha hecho en mi favor maravillas, Santo es su nombre" ( Lc 1, 49).

274 " Nada es, pues, más propio para afianzar nuestra Fe y nuestra Esperanza que la convicción profundamente arraigada en nuestras almas de que nada es imposible para Dios. Porque todo lo que ( el Credo) propondrá luego a nuestra fe, las cosas más grandes, las más incomprensibles, así como las más elevadas por encima de las leyes ordinarias de la naturaleza, en la medida en que nuestra razón tenga la idea de la omnipotencia divina, las admitirá más fácilmente y sin vacilación alguna" ( Catech. R. 1, 2, 13).

                                                                Resumen

275 Con Job, el justo, confesamos:" Sé que eres Todopoderoso: lo que piensas lo puedes realizar" (Job 42, 2).

276 Fiel al testimonio de la Escritura, la Iglesia dirige con frecuencia su oración al " Dios todopoderoso y eterno" ( omnipotens sempiterne Deus...), creyendo firmemente que nada es imposible para Dios" ( Gn 1, 14; Lc 1, 37; Mt 19, 26 ).

277 Dios manifiesta su omnipotencia convirtiéndonos de nuestros pecados y restableciéndonos en su amistad por la gracia ( " Deus, quia omnipotentiam tuam parcendo maxime et miserando manifestas...", " Oh Dios, que manifiestas especialmente tu poder con el perdón y la misericordia...", MR, colecta del domingo XXVI).

278 De no ser  por nuestra fe en que el amor de Dios es todopoderoso, ¿ cómo creer que el Padre nos ha podido crear, el Hijo rescatar, el Espíritu Santo santificar? (CIC 272-278).

Comentario: Insisto en la necesidad diaria de pedir al Dios Todopoderoso el don de la fe, la recibimos en el bautismo pero si no la ejercitamos, no crece.Seamos humildes y pidamos con fe  el don de la fe para nosotros y aquellos que amamos, y para aquellos a quienes deberíamos amar más, y para los que nos han hecho mal o a quienes nosotros hemos hecho algún mal.

martes, 23 de febrero de 2016

"La profesión de la fe"



                                                         "Párrafo 3 El Todopoderoso"

"268 De todos los atributos divinos, sólo la omnipotencia de Dios es nombrada en el Símbolo: confesarla tiene un alcance grande para nuestra vida. Creemos que es esa omnipotencia universal, porque Dios, que ha creado todo ( Cf. Gn 1, 1; Jn 1, 3), rige todo y lo puede todo; es amorosa, porque Dios es nuestro Padre ( Cf. Mt 6, 9), es misteriosa, porque sólo la fe puede descubrirla cuando se manifiesta en la debilidad" ( 2Co 12, 9 ; 1Co 1, 18).

                                  "Todo lo que El quiere, lo hace" ( Sal 115, 3)

269 Las Sagradas Escrituras confiesan con frecuencia el poder universal de Dios. Es llamado "el Poderoso de Jacob" ( Gn 49,24; Is 1, 24) " el Señor de los ejércitos", " el Fuerte, el Valeroso" ( Sal 24, 8-10). Si Dios es Todopoderoso " en el cielo y en la tierra" ( Sal 135,6), es porque El los ha hecho. Por tanto nada le es imposible ( Cf. Jr 32,17; Lc 1, 37) y dispone a su voluntad de su obra (Cf. Jr 27,5); es el Señor del universo, cuyo orden ha establecido, que le permanece enteramente sometido y disponible; es el Señor de la historia: gobierna los corazones y los acontecimientos según su voluntad ( Cf. Est 4, 17b; Pro 21, 1; Tb 13, 2):"El actuar con inmenso poder siempre está en su mano. ¿Quién podrá resistir la fuerza de su brazo? (Sb 11, 21).

                   " Te compadeces de todos porque lo puedes todo" ( Sb 11, 23)

270 Dios  es el Padre todopoderoso. Su paternidad y su poder se esclarecen mutuamente. Muestra, en efecto, su omnipotencia paternal por la manera como cuida de nuestras necesidades ( Cf. Mt 6, 32); por la adopción filial que nos da ( " Yo seré para vosotros Padre, y vosotros seréis para mí hijos e hijas, dice el Señor todopoderoso" ( 2Co 6, 18); finalmente, por su misericordia infinita, pues muestra su poder en el más alto grado perdonando libremente los pecados.

271 La omnipotencia divina no es en modo alguno arbitraria:" En Dios el poder y la esencia, la voluntad y la inteligencia, la sabiduría y la justicia son una sola cosa, de suerte que nada puede haber en el poder divino que no pueda estar en la justa voluntad de Dios o en su sabia inteligencia" ( Santo Tomás de A., s. th. 1, 25, 5, ad 1)" ( CIC 268-271).

Comentario: Para nosotros, el atributo divino más fácil de entender es la omnipotencia, Dios para ser Dios en nuestro lenguaje humano, tiene que ser Poderoso, el atributo de la misericordia es más difícil porque juzgamos con nuestro obrar que es rencoroso y nos cuesta perdonar. Es importante que aprovechemos este año de la Misericordia para acercarnos a Dios " un corazón contrito y humillado, tu Dios mío no lo desprecias".

lunes, 15 de febrero de 2016

" La profesión de la fe" (CIC 261-267)



                                                                   "Resumen


261 El misterio de la Santísima Trinidad es el misterio central de la fe y de la vida cristiana. Sólo Dios puede dárnoslo a conocer revelándose como Padre, Hijo y Espíritu Santo.

262 La Encarnación del Hijo de Dios revela que Dios es el Padre eterno, y que el Hijo es consubstancial al Padre, es decir, que es en El y con El el mismo y único Dios.

263 La misión del Espíritu Santo, enviado por el Padre en nombre del Hijo ( Cf. Jn 14, 26) y por el Hijo " de junto al Padre" ( Jn 15, 26), revela que El es con ellos el mismo Dios único. " Con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria".

264 " El Espíritu Santo procede del Padre en cuanto fuente primera y, por el don eterno de éste al Hijo, del Padre y del Hijo en comunión" ( San Agustín, Trin. 15, 26, 47).

265 Por la gracia del bautismo " en nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo" somos llamados a participar en la vida de la Bienaventurada Trinidad, aquí abajo en la oscuridad de la fe y, después de la muerte, en la luz eterna ( Cf. Pablo VI, SPF 9).

266 " La fe católica es ésta: que veneremos un Dios en la Trinidad y la Trinidad en la unidad, no confundiendo las personas, ni separando las substancias; una es la persona del Padre, otra la del Hijo, otra la del Espíritu Santo; pero del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo una es la divinidad, igual la gloria, coeterna la majestad" (Symbolum "Quicumque").

267 Las personas divinas, inseparables en su ser, son también inseparables en su obrar. Pero en la única operación divina cada una manifiesta lo que le es propio en la Trinidad, sobre todo en las misiones divinas de la Encarnación del Hijo y del don del Espíritu Santo.

Comentario: Tratemos de memorizar el resumen:especialmente debemos tener muy presente la fe en Dios uno y trino como el misterio central de  nuestra vida de cristianos creyentes, el mismo Padre nos lo ha revelado por medio de su Hijo.