sábado, 24 de junio de 2017

" La profesión de la fe" ( CIC 615-618)




                           "Jesus reemplaza nuestra desobediencia por su obediencia

614 " Como por la desobediencia de un solo hombre, todos los hombres fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno solo todos serán constituidos justos" ( Rm 5, 19). Por su obediencia hasta la muerte, Jesùs lleva a cabo la sustitución del Siervo doliente que " se dio a sí mismo en expiación", " cuando lleva el pecado de muchos", a quienes " justificará y cuyas culpas soportará  ( Is 53, 10-12). Jesus repara por nuestras faltas y satisface al Padre por nuestros pecados    (Cf. Cc. de Trento:DS 1529).


                                            En la cruz Jesùs consuma su sacrificio


616 El "amor hasta el extremo" ( Cf. Jn 13, 1) es el que confiere su valor de redención y de reparación, de expiación y de satisfacción al sacrificio de Cristo. Nos ha conocido y amado a todos en la ofrenda de su vida ( Cf. Ga 2, 20; Ef 5, 2.25). " El amor de Cristo nos apremia al pensar que, si uno murió por todos, todos por tanto murieron" ( 2Co 5, 14). Ningún hombre aunque fuese el más santo estaba en condiciones de tomar sobre sí los pecados de todos los hombres y ofrecerse en sacrificio por todos. La existencia en Cristo de la persona divina del Hijo, que al mismo tiempo sobrepasa y abraza a todas las personas humanas, y que le constituye Cabeza de toda la humanidad, hace posible su sacrificio redentor por todos.

617" Sua santissima passione in legno crucis nobis justificationem meriti"( " Por su sacratìsima pasiòn en el madero de la cruz nos mereció la justificación ")enseña el Concilio de Trento ( DS 1529) subrayando el carácter único del sacrificio de Cristo como " causa de salvación eterna" ( Hb 5, 9). Y la Iglesia venera la Cruz cantando: " O crux, ave, spes unica" ( " Salve, oh cruz, única esperanza ", himno " Vexilia Regís").


                                     Nuestra participaciòn en el sacrificio de Cristo

618 La Cruz es el único sacrificio de Cristo" único mediador entre Dios y los hombres" ( 1Tm 2, 5). Pero, porque en su Persona divina encarnada, " se ha unido en cierto modo con todo hombre" ( GS 22, 2). El " ofrece a todos la posibilidad de que, en  la forma de Dios sólo conocida, se asocien a este misterio pascual " ( GS 22, 5). El llama a sus discípulos a " tomar su cruz y a seguirle" ( Mt 16, 24) porque El  " sufrió por nosotros dejándonos ejemplo para que sigamos sus huellas" ( 1P 2, 21). El quiere en efecto asociar a su sacrificio redentor a aquellos mismos que son sus primeros beneficiarios ( Cf. Mc 10, 39; Jn 21, 18-19; Col 1, 24). Eso lo realiza en forma excelsa en su Madre, asociada más  íntimamente que nadie al misterio de su sufrimiento redentor ( Cf. Lc 2, 35).

            Fuera de la Cruz no hay otra escala por donde subir al cielo ( Santa Rosa de Lima, vida)."
(CIC 615-618).


Comentario: La invitaciòn de Cristo a "abrazar la cruz "no debe darnos miedo. Recordemos las palabras de Sn Juan Pablo II cuando fue elegido Papa " No tengàis miedo!!!, abrid el corazòn a Cristo!!!"De esto se trata, "amar màs y amar mejor " con el Amor de Dios hace falta la entrega con obras y con verdad, no sòlo con la boca. El amor a Dios nos invita a llevar a pulso la cruz, a sentir tambièn nosotros el peso de la humanidad entera, y a cumplir, en las circunstancias propias del estado y del trabajo de cada uno, los designios, claros y amorosos a la vez, de la voluntad del Padre.

martes, 20 de junio de 2017

" La profesión de la fe" ( CIC 612-614)



                                                " La agonìa de Getsemanì


"612 El cáliz de la Nueva Alianza que  anticipó en la Cena al ofrecerse a sí mismo ( Cf. Lc 22, 20), lo acepta a continuación de manos del Padre en su agonìa de Getsemanì ( Cf. Mt 26, 42) haciéndose " obediente hasta la muerte" ( Flp 2, 8; Cf. Hb 5, 7-8). Jesus ora: " Padre mío, si es posible, que pase de mí este cáliz..." ( Mt 26, 39). Expresa así el horror que representa la muerte para su naturaleza humana. Esta, en efecto, como la nuestra, está destinada a la vida eterna; además, a diferencia de la nuestra, está perfectamente exenta de pecado ( Cf. Hb 4, 15) que es la causa de la muerte ( Cf. Rm 5, 12); pero sobre todo esta asumida por la persona divina del " Príncipe de la vida"  ( Hch 3, 15), de " el que vive" ( Ap 1, 18; Cf. Jn 1, 4; 5, 26). Al aceptar en su voluntad humana que se haga la voluntad del Padre ( Cf. Mt 26, 42), acepta su muerte como redentora para " llevar nuestras faltas en su cuerpo sobre el madero" ( 1P 2, 24).

                               La muerte de Cristo es el sacrificio único y definitivo


613 La muerte de Cristo es a la vez el sacrificio pascual que lleva a cabo la redención definitiva de los hombres ( Cf. 1Co 5, 7; Jn 8, 34-36) por medio del " cordero que quita el pecado del mundo" ( Jn 1, 29; Cf. 1P 1, 19) y el sacrificio de la Nueva Alianza ( Cf. 1Co 11, 25) que devuelve al hombre a la comunión con Dios ( Cf. Ex 24, 8) reconciliándole con El por " la sangre derramada por muchos para remisión de los pecados" ( Mt 26, 28; Cf. Lv 16, 15-16).

614 Este sacrificio de Cristo es único, da plenitud y sobrepasa a todos los sacrificios ( Cf. Hb 10, 10). Ante todo es un don del mismo Dios Padre: es el Padre quien entrega al Hijo para reconciliarnos con El ( Cf. Jn 4, 10). Al mismo tiempo es ofrenda del Hijo de Dios hecho hombre que, libremente y por amor ( Cf. Jn 15, 13), ofrece su vida ( Cf. Jn  10, 17-18) a su Padre por medio del Espíritu Santo ( Cf. Hb 9, 14), para reparar nuestra desobediencia. ( CIC 612-614).


Comentario: La biografia de Nuestro Señor la encontramos en los evangelios " Pasó haciendo el bien" y nosotros? Una mirada para ver si tenemos algo que enmendar.... Para imitar a Jesùs hace falta humildad. Miremos de nuevo el ejemplo de Cristo. Jesus obedece, y obedece a José y a Maria. Dios ha venido a la tierra para obedecer, y para obedecer a las criaturas. Para obedecer debemos aprender a servir.

martes, 13 de junio de 2017

" La profesión de la fe" (CIC 609-611)




                            " Jesùs  acepta libremente el amor redentor del Padre

609 Jesùs, al aceptar en su corazón humano el amor del Padre hacia los hombres, " los amó hasta el extremo" ( Jn 13, 1) porque " nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos" ( Jn 15, 13). Tanto en el sufrimiento como en la muerte, su humanidad se hizo el instrumento libre y perfecto de su amor divino que quiere la salvación de los hombres ( Cf. Hb 2, 10.17-18; 4, 15; 5, 7-9). En efecto, acepta libremente su pasión y su muerte por amor a su Padre y a los hombres que el Padre quiere salvar: " Nadie me quita la vida; yo la doy voluntariamente" ( Jn 10, 18). De aquí la soberana libertad del Hijo de Dios cuando El mismo se encamina hacia la muerte ( Cf. Jn 18, 4-6; Mt 26, 53).

                               Jesùs anticipó en la cena la ofrenda libre de su vida

610 Jesùs expresó de forma suprema la ofrenda libre de sí mismo en la cena tomada con los Doce Apóstoles ( Cf. Mt 26, 20), en " la noche en que fue entregado" ( 1Co 11, 23). En la víspera de su Pasión, estando todavía libre, Jesùs hizo de esta última Cena con sus apóstoles el memorial de su ofrenda voluntaria al Padre ( Cf. 1Co 5, 7), por la salvación de los hombres: " Este es mi Cuerpo que va a ser entregado por vosotros" ( Lc 22, 19). " Esta es mi sangre de la Alianza que va a ser derramada por muchos para remisión de los pecados" ( Mt 26, 28).

611 La Eucaristía que instituyó en ese momento será el " memorial" ( 1Co 11, 25) de su sacrificio. Jesus incluye a los apóstoles en su propia ofrenda y les manda perpetuarla ( Cf. Lc 22, 19). Así Jesùs instituye a sus apóstoles sacerdotes de la Nueva Alianza: " Por ellos me consagro a mí mismo para que ellos sean también consagrados en la verdad " ( Jn 17, 19; Cf. Cc Trento: DS 1752. 1764). ( CIC 609-611).

 Comentario: "¿ Estamos seriamente dispuestos a cumplir, en todo, la voluntad de nuestro Padre Dios? ¿ Hemos dado al Señor nuestro corazón entero, o seguimos apegados a nuestros intereses, a nuestra comodidad, a nuestro amor propio? ¿ Hay algo que no responde a nuestra condición de cristianos, y que hace que no queramos purificarnos? Hoy se nos presenta la ocasión de rectificar." (San Josemaria " Es Cristo que pasa" 15.

martes, 6 de junio de 2017

" La profesión de la fe" (CIC 606-608)



                                 " III Cristo se ofreció a su Padre por nuestros pecados


                                         Toda la vida de Cristo es ofrenda al Padre

606 El Hijo de Dios " bajado del cielo no para hacer su voluntad sino la del Padre que le ha enviado" (Jn 6, 38), " al entrar en este mundo, dice... He aquí que vengo... para hacer, oh Dios, tu voluntad... En virtud de esta voluntad somos santificados, merced a la oblación de una vez para siempre del cuerpo de Jesucristo " ( Hb 10, 5-10). Desde el primer instante de su Encarnación el Hijo acepta el designio divino de salvación en su misión redentora: " Mi alimento es hacer la voluntad del que me ha enviado y llevar a cabo su obra" ( Jn 4, 34). El sacrificio de Jesùs" por los pecados del mundo entero" ( 1Jn 2, 2), es la expresión de su comunión de amor con el Padre: " El Padre me ama porque doy mi vida" ( Jn 10, 17). " El mundo ha de saber que amo al Padre y que obro según el Padre me ha ordenado" ( Jn 14, 31).


 607 Este deseo de aceptar el designio de amor redentor de su Padre anima toda la vida de Jesùs ( Cf. Lc 12, 50; 22, 15; Mt 16, 21-23) porque su Pasión redentora es la razón de ser de su Encarnación:  "¡Padre, líbrame de esta hora! Pero ¡si he llegado a esta hora para esto!" ( Jn 12, 27). " El cáliz que me ha dado el Padre ¿no lo voy a beber?" ( Jn 18, 11). Y todavía en la cruz, antes de que " todo esté cumplido" ( Jn 19, 39), dice: "Tengo sed" ( Jn 19, 28).


                                       " El cordero que quita el pecado del mundo"

608 Juan Bautista, después de haber aceptado bautizarle en compañía de los pecadores ( Cf. Lc 3, 21; Mt 3, 14-15), vio y señaló a Jesùs como el " Cordero de Dios que quita los pecados del mundo " ( Jn 1, 29; Cf. Jn 1, 36). Manifestó así que Jesùs es a la vez el Siervo doliente que se deja llevar en silencio al matadero ( Is 53, 7; Cf. Jr 11, 19) y carga con el pecado de las multitudes ( Cf. Is 53, 12) y el cordero pascual símbolo de la redención de Israel cuando celebró la primera Pascua ( Ex 12, 3-14; Cf Jn 19, 36; 1Co 5, 7). Toda la vida de Cristo expresa su misión: " Servir y dar su vida en rescate por muchos" ( Mc 10, 45)." ( CIC 606-608).

Comentario: En el ministerio petrino del Papa Francisco "el nombre de Dios es Misericordia" , encontramos que todas las actuaciones de Dios están orientadas por el inmenso amor que tiene al hombre, y nosotros seguimos empeñados en rechazar ese amor con nuestra indiferencia y nuestro pecado. " En este clima de la misericordia de Dios ,se desarrolla la existencia del cristiano... medios..para lograr que la vocación se afiance: la vida interior y la formación doctrinal, el conocimiento profundo de nuestra fe"  (San Josemaria " Es Cristo que pasa" 8).