domingo, 25 de abril de 2021

" Vida en Cristo" ( CIC 1710-1715)

 


                                                                   " Resumen

1710   " Cristo manifiesta plenamente el hombre al propio hombre y le descubre la grandeza de su vocación" ( GS 22, 1)

1711   Dotado de alma espiritual, de entendimiento y de voluntad la persona humana está desde su concepción ordenada a Dios y destinada a la bienaventuranza eterna. Camina hacia su perfección en la búsqueda y el amor de la verdad y del bien ( Cf. GS 15, 2).

1712   La verdadera libertad es en el hombre el " signo eminente de la imagen divina" ( GS 17).

1713   El hombre debe seguir la ley moral que le impulsa " a hacer el bien y a evitar el mal" ( GS 16). Esta ley resuena en su conciencia.

1714   El hombre, herido en su naturaleza por el pecado original, está sujeto al error e inclinado al mal en el ejercicio de su libertad.

1715   El que cree en Cristo tiene la vida nueva en el Espíritu Santo. La vida moral, desarrollada y madurada en la gracia, alcanza su plenitud en la gloria del cielo". ( CIC 1710-1715).

Comentario:

El que vive de fe puede encontrar la dificultad y la lucha, el dolor y hasta la amargura, pero nunca el desánimo ni la angustia porque sabe que su vida sirve, sabe para que ha venido a esta tierra. " Para amar a Dios y servirle en esta vida y después verle y gozarle en el Cielo" esta certeza da brillo a nuestra vida y luz a nuestro trabajo como medio de nuestra santificación que es hacer la voluntad de Dios en todo.


domingo, 18 de abril de 2021

" Vida en Cristo" ( CIC 1701-1709)

 


                                                    " Artículo 1: El hombre, imagen de Dios

1701   " Cristo, el nuevo Adán, en la misma revelación del misterio del Padre y de su amor, manifiesta plenamente el hombre al propio hombre y le descubre la grandeza de su vocación " ( GS 22,1). En Cristo, " imagen de Dios invisible" ( Col 1, 15; Cf. 2Co 4,4), el hombre ha sido creado " a imagen y semejanza" del Creador. En Cristo, redentor y salvador, la imagen divina alterada en el hombre por el primer pecado ha sido restaurada en su belleza original y ennoblecida con la gracia de Dios ( Cf. GS 22, 2).

1702   La imagen divina está presente en todo hombre. Resplandece en la comunión de las personas a semejanza de la unidad de las personas divinas entre sí ( Cf. Capítulo segundo).

1703   Dotada de un alma " espiritual e inmortal" ( GS 14), la persona humana es la " única criatura en la tierra a la que Dios ha amado por sí misma" ( GS 24, 3). Desde su concepción está destinada a la bienaventuranza eterna.

1704   La persona humana participa de la luz y la fuerza del Espíritu divino. Por la razón es capaz de comprender el orden de las cosas establecido por el Creador . Por su voluntad es capaz de dirigirse por sí misma a su bien verdadero. Encuentra su perfección en la búsqueda y el amor de la verdad y del bien ( Cf. GS 15, 2).

1705   En virtud de su alma y de sus potencias espirituales de entendimiento y de voluntad, el hombre está dotado de libertad, " signo eminente de la imagen divina" ( GS 17).

1706   Mediante su razón, el hombre conoce la voz de Dios que le impulsa " a hacer el bien y a evitar el mal" ( GS 16). Todo hombre debe seguir esta ley que resuena en la conciencia y que se realiza en el amor de Dios y del prójimo. El ejercicio de la vida moral proclama la dignidad de la persona humana.

1707   " El hombre, persuadido por el maligno, abusó de su libertad, desde el comienzo de la historia"  (GS 13, 1). Sucumbió a la tentación y cometió el mal. Conserva el deseo del bien, pero su naturaleza lleva la herida del pecado original. Ha quedado inclinado al mal y sujeto al error.

        De ahí que el hombre esté dividido en su interior. Por esto, toda vida humana, singular o colectiva, aparece como una lucha, ciertamente dramática entre el bien y el mal, entre la luz y las tinieblas (GS 13,2).

1708   Por su pasión, Cristo nos libró de Satán y del pecado. Nos mereció la vida nueva en el Espíritu Santo. Su gracia restaura en nosotros lo que el pecado había deteriorado.

1709   El que cree en Cristo es hecho hijo de Dios. Esta adopción filial lo transforma dándole la posibilidad de seguir el ejemplo de Cristo. Le hace capaz de obrar rectamente y de practicar el bien. En la unión con su Salvador, el discípulo alcanza la perfección de la caridad, la santidad. La vida moral, madurada en la gracia, culmina en la vida eterna, en la gloria del cielo."( CIC 1701-1709).

Comentario:

La persona humana, hecha " a imagen y semejanza de Dios"está llamada a la santidad, y debemos entender que estamos en esta vida para amar y servir a Dios en esta vida y después verle y gozarle en el Cielo. Ese es el plan de Dios pero El respeta nuestra libertad y si no hacemos su voluntad y nos alejamos de El nuestro destino a pesar del querer de Dios de nuestra santificación, será entonces nuestra condenación Dios no nos condena nosotros preferimos alejarnos de El y rechazarlo. 

domingo, 11 de abril de 2021

" Vida en Cristo" ( CIC 1699- 1700)

 


                                                            " Primera sección

                                        La vocación del hombre: la vida en el Espíritu

1699   La vida en el Espíritu Santo realiza la vocación del hombre ( capítulo primero), Está hecha de caridad divina y solidaridad humana ( capítulo segundo). Es concedida gratuitamente como una Salvación ( capítulo tercero).

                                                              Capítulo primero

                                                La dignidad de la persona humana

1700   La dignidad de la persona humana está enraizada en su creación a imagen y semejanza de Dios (artículo  1); se realiza en su vocación a la bienaventuranza divina ( artículo 2). Corresponde al ser humano llegar libremente a esta realización ( artículo 3). Por sus actos deliberados ( artículo 4), la persona humana se conforma, o no se conforma, al bien prometido por Dios y atestiguado por la conciencia moral (artículo 5). Los seres humanos se edifican a sí mismos y crecen desde el interior: hacen de toda su vida sensible y espiritual un material de su crecimiento ( artículo 6). Con la ayuda de la gracia crecen en la virtud ( artículo 7), evitan el pecado y, si lo han cometido recurren como el hijo pródigo ( Cf. Lc 15, 11-31) a la misericordia de nuestro Padre del cielo ( artículo 8) . Así acceden a la perfección de la caridad." 

( CIC 1699-1700)

Comentario:

Empezamos hoy las enseñanzas del catecismo sobre la vocación del hombre y los principios que rigen nuestra vida como seres humanos y el estudio de nuestra diferencia con la vida animal, tratemos de estudiar con interés estas verdades para entender nuestro destino hacia la patria celestial y colaborar para que el plan de Dios  que " quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad" se realice.  

       

domingo, 4 de abril de 2021

" La vida en Cristo" ( CIC 1697-1698)

 


.......  

  " 1697   En la   catequesis es importante destacar  con toda claridad el gozo y las exigencias del camino de Cristo ( Cf. CT 29). La catequesis de la " vida nueva" en El ( Rm 6, 4) será:

   - una catequesis del Espíritu Santo, Maestro interior de la vida según Cristo, dulce huésped del alma que inspira, conduce, rectifica y fortalece esta vida; 

   - una catequesis de la gracia, pues por la gracia somos salvados, y también por la gracia nuestras obras pueden dar fruto para la vida eterna;

  - una catequesis de las bienaventuranzas, porque el camino de Cristo está resumido en las bienaventuranzas, único camino hacia la dicha eterna a la que aspira el corazón del hombre;

  -una catequesis del pecado y del perdón, porque sin reconocerse pecador, el hombre no puede conocer la verdad sobre sí mismo, condición del obrar justo, y sin el ofrecimiento del perdón no podría soportar esta verdad;   

  -una catequesis de las virtudes humanas, que haga captar la belleza y el atractivo de las rectas disposiciones para el bien;

  -una catequesis de las virtudes cristianas de fe, esperanza y caridad que se inspire ampliamente en el ejemplo de los santos;

  - una catequesis del doble mandamiento de la caridad, desarrollado en el Decálogo;

  - una catequesis eclesial, pues en los múltiples intercambios de " los bienes espirituales " en la  "comunión de los santos" es donde la vida cristiana puede crecer, desplegarse y comunicarse.

   1698   La referencia primera y última de esta catequesis es siempre Jesucristo que es " el camino, la verdad y la vida" ( Jn 14, 6). Contemplándole en la fe, los fieles de Cristo pueden esperar que El realice en ellos sus promesas, y que amándolo con el amor con que El nos ha amado realicen las obras que corresponden a su dignidad:

   Os ruego que penséis que Jesucristo, Nuestro Señor, es vuestra verdadera Cabeza, y que vosotros sois uno de sus miembros. El es con relación a vosotros lo que la cabeza es con relación a sus miembros; todo lo que es suyo es vuestro, su espíritu, su Corazón, su cuerpo, su alma y todas sus facultades, y debéis usar de ellos como de cosas que son vuestras, para servir, alabar, amar y glorificar a Dios. Vosotros sois de El como los miembros lo son de su cabeza. Así desea El ardientemente usar de todo lo que hay en vosotros, para el servicio y la gloria del Padre, como de cosas que son de El ( San Juan Eudes, cord. 1, 5).

Mi vida es Cristo ( Flp 1, 21)."

( CIC 1696-1698).

Comentario:

Estos dos puntos del CIC completan la introducción, que empezamos la semana pasada, a la tercera parte del Catecismo dedicada a la Vida en Cristo, aquí nos están esbozando los grandes temas de esta parte que constituye la ética cristiana.

Recordemos que toda la Fe y la Moral que contiene el Catecismo es como una mesa de cuatro patas:

 La primera parte es el Credo

segunda parte los Sacramentos

tercera parte la Vida en Cristo

Cuarta parte La oración

Para que la mesa de nuestra relación con Dios esté firme debemos conocer todas las verdades contenidas en el Catecismo si alguna de ellas falla puede que la mesa siga en pie pero se tambalea si nos faltan dos patas con dificultad se sostiene si le faltan tres irremediablemente se cae no dejemos que nuestra adhesión a la persona de Cristo y a la Trinidad se nos caiga " Hemos sido comprados a un gran precio, toda la Sangre de Cristo, fue el rescate por nuestros pecados" Sn Pablo no hagamos estéril el sacrificio de Cristo. El Padre no quiere que se pierda ni uno sólo de nosotros pero " El Señor que te creo sin ti, no te salvará sin tí" Sn Agustín.